Si el dolor fuera sexy, se llamaría Creighton King. En God of Pain, Rina Kent nos vuelve a arrastrar (felizmente) al abismo con una historia de mafia, deseo y tensión tan densa que la podés cortar con un cuchillo… o con una amenaza bien dicha. Annika Volkov, hija de la mafia y reina sin corona, pensó que podía jugar con fuego y salir ilesa. Pero no contaba con Creighton: silencioso, emocionalmente inaccesible y con más traumas que sonrisas. Ella es obstinada. Él, una bomba de tiempo. ¿Resultado? Un duelo explosivo donde el amor se viste de guerra.
Perfecto para lectoras que buscan química intensa, enemigos declarados, y un romance donde romperse el uno al otro es parte del contrato (no escrito, obvio).